La arquitectura la “tocamos” cuando cogemos la manilla con la mano. Este gesto nos abre las puertas a sus diferentes espacios. De este modo, la manilla tiene una maravillosa carga “poética” como nexo de unión entre la persona y el espacio, entre el diseño de la arquitectura y el diseño del objeto.
Grandes arquitectos y diseñadores de todo el mundo, se han sentido atraídos por el reto de diseñar un producto “solo aparentemente simple”, como es una manilla para Olivari. Por ejemplo, en 1954 Gio Ponti diseñó la manilla Lama para el rascacielos Pirelli en Milán. 60 años después sigue siendo vigente, y Rodolfo Dordoni lleva la manilla a su concepto más esencial con los modelos Total y Radial.
Otras muchas emocionantes historias desde la fundación en Novara (1911) con hitos como la introducción de tecnología de estampado por prensa hidraúlica en el latón (años 80), las primeras manillas Space Q y Time Q de Alessandro Mendini con roseta cuadrada (2005) o el desarrollo de la roseta "bassa" de solo 5mm de espesor compatible con cualquier puerta (2009); a protagonistas como Marcel Wanders, Antonio Citterio, Zaha Hadid, Vincent Van Duysen, Patricia Urquiola, Toyo Ito, Rem Koolhas, Piero Lissoni, Jean Nouvel, Daniel Libeskind, Andrea Branzi recorren los más de 100 años de Olivari liderando el “Made in Italy”.
Descúbrelo detalladamente en el libro “Macchina Semplice” 100 años de la Arquitectura al Diseño” (PDF).
Olivari está presente en España desde 1988, durante este tiempo, especialmente en los últimos años, se ha posicionado como líder en manillas de diseño y calidad. Permite elegir entre una amplia gama de diseños y acabados diferentes de altas prestaciones y con garantía. Gracias a su excelencia productiva y su actualidad estética. Muchas de sus manillas, con el tiempo se han convertido en “clásicos” y son reconocidas y apreciadas como iconos del “Made in Italy”.