Vivimos en un mundo complejo, dinámico y tecnificado que nos brinda numerosas oportunidades de bienestar social, desarrollo personal y calidad de vida. Pero donde todas las herramientas de comunicación y orientación giran en torno a la visión.
Muchas veces, esta supremacía visual puede constituir un gran problema para las personas con discapacidad visual, que constantemente deben enfrentarse a obstáculos y factores de exclusión que les impiden sentirse partícipes y totalmente integrados en la sociedad. Y, obviamente, como ciudadanos y consumidores, tienen el mismo derecho que los demás a poder acceder de manera autónoma a los distintos espacios y conocer la información que se da.
Obviamente, la inclusión de toda la sociedad pasa por conseguir la accesibilidad de las personas, incluidas aquellas con discapacidad visual, en cualquier espacio. En este sentido, empresas como Databraille ofrecen numerosas soluciones para adaptar espacios tanto exteriores como interiores, de manera que las personas con problemas de visión puedan sentirse cómodas y seguras y disfrutar de una mayor autonomía.
¿A qué barreras se enfrentan las personas con discapacidad visual?
Actualmente, las principales barreras a las que se enfrentan las personas con discapacidad visual son las de comprensión de la información y las de acceso físico. Por un lado, encuentran dificultades para moverse por espacios desconocidos y localizar diferentes puntos dentro de ellos.
Con lo cual, les resulta mucho más complicado interactuar no solamente con el propio entorno, sino también con las personas, lo que puede hacer que se sientan aislados del mundo, con los efectos negativos que esto implica para su salud y bienestar.
Hace unos años, la accesibilidad se relacionaba casi exclusivamente con la necesidad de suprimir las barreras físicas, consideradas como las causantes de este tipo de problemas. Sin embargo, este concepto ha ido evolucionando y, hoy en día, la persona y su entorno son entendidos como un conjunto indisoluble, por lo que se considera que el espacio en el que se mueve tiene que garantizar y normalizar sus desplazamientos.
¿Cómo solucionar los problemas de accesibilidad para las personas con discapacidad visual?
La visión nos permite interpretar rápidamente todo lo que nos rodea y controlar el espacio, lo que resulta clave para desplazarse de forma segura y autónoma. En el caso de las personas con discapacidad visual, estas capacidades tienen que ser complementadas o sustituidas por habilidades que se apoyen en otros sentidos.
En esta línea, es indispensable que los espacios apliquen medidas que favorezcan la orientación, la localización de objetos y lugares de interés, reducir los riesgos y avisar sobre los potenciales peligros que pueda haber en el entorno y obtener la información necesaria de manera fácilmente comprensible.
Cartelería y señalización de espacios
La cartelería informativa y la señalización de espacios emplean el contraste, la iluminación, el color y el tamaño para favorecer la localización de determinados elementos y el acceso a la información por parte de las personas con discapacidad visual. Lo que puede complementarse con mapas táctiles o hápticos, los sistemas visuales y auditivos, y los audio guías.
Algunas de las soluciones que ofrecen empresas como Databraille son las siguientes:
– Vinilos autoadhesivos: un material muy versátil con capacidad de autopegado que puede estamparse en braille y altorrelieve. Siendo muy habitual en la señalización de espacios interiores. Además, la posibilidad de hacerlos en materiales transparentes permite añadir la información en braille sobre la señalización ya existente.
– Altorrelieve sobre Forex: son placas de PVC espumado grabadas con información en braille. Muy resistentes y ligeras, por lo que puedes usarse tanto en espacios interiores como exteriores.
– Placas de aluminio con braille: gracias a su resistencia son ideales para zonas de mucho paso y para exteriores.
– Estampación braille sobre panel sándwich y composite (dibond): su resistencia lo hace perfecto para usarse tanto en interiores como en exteriores.
Todas ellas soluciones sencillas y fácilmente aplicables para que los entornos resulten accesibles para todas las personas.
Y permiten su personalización tanto en el diseño como en forma y colores, porque la accesibilidad no implica renunciar a la estética.
Superficies podotáctiles
En su objetivo de lograr la total inclusión de las personas con discapacidad visual en la sociedad, la empresa Databraille apuesta también por soluciones que favorezcan que los espacios sean lo más accesibles posible. En este sentido, trabaja también con encaminamientos podotáctiles para hacer que los entornos tanto públicos como privados sean cada vez más seguros e inclusivos. Altamente resistentes y con propiedades antideslizantes para garantizar la seguridad de todas las personas.
Las superficies podotáctiles son puntos o líneas que se instalan en el pavimento para guiar a las personas invidentes o con problemas de visión por el espacio y advertir sobre los posibles peligros que puedan encontrarse, brindándoles de esta forma una mayor autonomía a la hora de desplazarse en su día a día.
Eso sí, desde Databraille hacen hincapié en la importancia de que la instalación de las señales podotáctiles se realice correctamente para garantizar su eficacia y siempre con materiales de alta calidad que resistan el paso de las personas sin desgastarse, como el aluminio y el PVC. Además de estar situadas en el lugar adecuado tanto cuando actúan como advertencia como cuando sirven de orientación.
Por supuesto, también hay que destacar la importancia de concienciar a los ciudadanos sobre el buen uso de este tipo de señales, evitando que se coloquen barreras que puedan suponer un obstáculo en la accesibilidad para las personas con discapacidad visual, de manera que todos disfrutemos de una mayor autonomía de movimiento y de una mejor calidad de vida.